Adiós a una leyenda: murió Robbie Robertson, el mítico líder de The Band
Tenía 80 años. En la década del setenta fue una pieza clave del popular grupo que había comenzado como respaldo den Ronnie Hawkins y luego como banda de gira de Bob Dylan.
El músico y compositor canadiense Robbie Robertson, que se destacó como líder del influyente grupo de rock The Band en la década del setenta, murió este miércoles a los 80 años después de padecer una larga enfermedad.
Su muerte fue anunciada por su antiguo manager, Jared Levine. "Robbie estaba rodeado de su familia al momento de su muerte, incluida su esposa, Janet, su ex esposa, Dominique, su pareja Nicholas y sus hijos Alexandra, Sebastian, Delphine y la pareja de Delphine, Kenny", dijo. "También le sobreviven sus nietos Angelica, Donovan, Dominic, Gabriel y Seraphina".
Nacido como Jaime Royal Robertson el 5 de julio de 1943, fue uno de los dos últimos miembros sobrevivientes de The Band, una influyente banda de rock que mezcló folk, gospel y jazz con rhythm and blues y ayudó a forjar un sonido de rock de raíces claramente estadounidense. El baterista Levon Helm murió en 2012, el bajista Rick Danko en 1999 y el pianista Richard Manuel en 1986. El único que queda con vida es el tecladista Garth Hudson.
Robertson empezó su carrera muy joven. A los 16 años se unió como guitarrista de la banda del artista de rockabilly Ronnie Hawkins donde conoció a sus compañeros con quienes acompañaría a Bob Dylan en 1965, y formaría The Band, una de las formaciones más reverenciadas del rock americano de finales de los 60 y los 70.
Robertson permanecería en el grupo entre 1965 y 1976, publicando seis discos, como su mítico debut Music From The Big Pink, y dejando inmortalizado su último concierto en la película The Last Waltz dirigida por Martin Scorcese con quien establecería una estrecha colaboración componiendo muchas de sus bandas sonoras, entre ellas la de su nueva película Killers of the Flower Moon.
Los temas más populares que compuso para The Band fueron The Weight, Up On Cripple Creek, The Night They Drove Old Dixie Down, The Shape I’m In y It Makes No Difference.
A lo largo de su carrera, Robertson editó seis discos en solitario y participó en grabaciones de artistas como el propio Dylan, Tom Petty, Maria McKee y Roy Orbison.
Fue incluido con sus compañeros de banda en el Salón de la Fama Juno de Canadá en 1989 y en el Salón de la Fama del Rock and Roll en 1994. Recibió un Premio a la Trayectoria de la Academia Nacional de Compositores en 1997.